Corrupción

Lo peor de todo es acostumbrarse a cierto léxico que emerge desde estos últimos años. La palabra "corrupción" a base de ser utilizada pareciera recubrirse de un halo de naturalidad. Mientras este país trata de sobrevivir con un índice de desempleo dantesco, los que gobiernan siguen riendo y relativizando hasta la saciedad gracias a los medios de comunicación sus tretas más oscuras. Sigan votándolos!

Descrédito politico

En nuestra manía por hacer emerger las estrategias de conducir a la fuerza social hacia donde los organismos de poder requieren y necesitan, hoy leemos el siguiente titular en un periódico de tirada nacional: "Acorralados. Los partidos e instituciones desbordados por la oleada de casos de corrupción." De nuevo se positiviza o al menos se trata de naturalizar que los políticos se mueven en un tejido relativo en donde algunos medios de comunicación utilizan las palabras "acorralado o desbordado" tratando de teñir a la opinión pública en ese doble juego de sentimiento relativista que finalmente acaba muriendo a manos del maniqueísmo más absurdo. Si alguien se siente desbordado porque el agua de su propio grifo le llega al cuello es que, como mínimo, es estúpido. Y ése es el Estado que mantenemos.

Oriente

Leemos hoy la noticia de que un partido radical en la India reparte cuchillos entre las mujeres de las principales ciudades como represalia tras las agresiones y muertes sufridas los pasados días a manos de violentos y violadores en la vía pública. Llama mucho la atención que un diario tan respetable, supuestamente, en España dé detalles incluso de la longitud de la hoja de estos cuchillos. No es sino una estrategia más de avivar y educar la mirada hacia Oriente poblado por civilizaciones arcaicas, violentas y primitivas. Una muestra más del racismo estructural dominante en Europa que, eso sí muestra orgullosa su plumaje basado en el Feng-Sui, el Sushi y las terapias alternativas, usándolas a su mejor acomodo o como bien le place.

El Artesano, Richard Sennett

Adjunto el link de la reseña acerca de una de las obras que más me ha cautivado en estos tiempos difusos por su rigor. Un texto analítico, didáctico y que reivindica el trabajo bien hecho por encima de aquellas directrices homogeneizadoras propias del consumismo.

La cultura de la incultura

En esta erupción de absurdeces, palabrerías y estupideces a las que asistimos cotidianamente, nos hemos encontrado con la cancelación en la capital de España de dos eventos culturales o "contraculturales" como se denominan por aquellos que se otorgan la venia de liderar nuestro diccionario social, es decir, aquellos que desde el poder otorgan e imponen a las palabras el sentido que les conviene. Estos dos eventos, eran dos conciertos de grupos musicales, que muy lejos de liderar las listas de éxitos, son de calado contestatario y cuyas letras harían temblar a los más conservadores hasta partirse en dos. Éste es un nuevo ejemplo del panorama represivo que nos rodea, en donde la censura serpentea sutilmente prohibiendo la libertad de expresión...