"Google nos conoce muy bien porque hace años que en cada busca que hacemos le decimos lo que nos interesa, en cada clic aquello que nos importa y en cada video que miramos en YouTube aquello que nos gusta. Con los calendarios sabe dónde iremos de vacaciones, con GoogleMaps sabe dónde estamos y con Gmail lo que dice al correo antes que a nosotros."


J. Maria Ganyet
"La educación también cambiará, aunque hay enormes resistencias corporativas y sentimentales a aceptar que hoy aún estamos educando para el mundo del pasado. Hay que dejar de obsesionarse por exámenes, tests y resultados: las grandes habilidades de ese porvenir que estudiamos hoy no se están incentivando, porque no se pueden medir."

Mark Stevenson
Muchas veces hemos escuchado eso de: "ya no sé donde vamos a llegar". Pues...ya hemos llegado. En este devenir social, donde la falta de referencias dignas y la ceguera ante la tecnología nos hablan de un suceso terriblemente grave: el de una joven francesa que graba su suicidio en internet. Una manera harto estúpida de llamar la atención de aquellos que estuvieron al otro lado de ese profundo mar que cada día engulle tanta energía de tantos jóvenes, que vacían las plazas para llenar las pantallas. No es gratuito que este fenómeno de internet, las redes sociales y los anonimatos se lleven por delante a muchos jóvenes frágiles que tiene muchas dificultades para enfrentarse a la vida real, situándose en un universo paralelo en donde todo es posible y, sobre todo, el no sentirse más frágil. Ya no hace falta llegar a ningún sitio. Oceáne, con 19 años ya ha llegado y no hay vuelta atrás. Lo increíble es que sigamos adorando estos universos para-lelos sin medida ni educación. Grave, muy grave.